El estilo vanguardista, el cual se caracteriza por recrear espacios donde lo actual y la tecnología conviven y se aprecian en todos los rincones. Está permitido experimentar y renovar, apuntando al dinamismo y el cambio continuo.
Las casas vanguardistas tienen diseños asimétricos, poco cargadas pero que buscan generar impacto visual con acabados ultramodernos y diseños geométricos. Por dentro, se podrá ver que los muebles no recargan el ambiente sino que forman un conjunto armonioso y despejado.
El mobiliario elegido será de aluminio, PVC o acero, de líneas simples. Los sillones estarán tapizados con telas lisas y de un solo color neutro: marrón, gris o blanco. La gran protagonista en cuanto a complementos es la tecnología: electrodomésticos y artículos de electrónica de última generación no pueden faltar, especialmente los sistemas de audio y las pantallas planas colgadas en la pared.
Volviendo a la decoración, los textiles para cortinas, alfombras y almohadones pueden ser con estampados geométricos o abstractos. Y el detalle: para adornar las paredes, se eligen cuadros de pinturas abstractas.
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